3-4 Porciones
Fácil
5 minutos
10 minutos
Este es un clásico plato para comer en un día caluroso de verano, con un toque extra refrescante. Esta deliciosa sopa helada me da la sensación de estar de vacaciones. Cuando niña odiaba las sopas de tomate, pero cuando probé esta sopa la primera vez que viajé a Madrid, cambié enseguida de opinión y ahora disfruto mucho cada vez que como este plato. Me encanta agregar mi propio toque a recetas clásicas, así que hice mi versión del clásico Gazpacho y le agregué esta espumosa salsa de menta y yoghurt para hacer que la sopa sea incluso más refrescante. Lo mejor de esta receta: está lista en un par de minutos, no necesita cocción, sólo tienes que licuarla.
Ingredientes
Para el Gazpacho:
- 1-2 tomates maduros (350 g aprox.) *Yo usé 1 tomate mediano que se conoce como “corazón de buey”.
- 1 mini pepino (65 g aprox.) *Yo usé uno que se puede comer la cáscara. Si no tienes uno así, pélalo.
- 150-160 ml de agua (*puedes agregar más, depende si quieres que la sopa quede más espesa o más líquida)
- 1 cdta de sal (aprox.)
- 1-2 cdas de aceite de oliva
- 1-2 cdas de jugo de limón
- Una pizca de azúcar
- Una pizca generosa de ajo en polvo (o un diente de ajo si quieres que el sabor del ajo sea más intenso), pimienta negra molida y comino molido.
- *Opcional: Una pizca de ají en polvo.
Para la salsa de menta:
- 10 hojas de menta (menta negra es una buena opción)
- 3 cdas de yoghurt natural sin azúcar
- 1 cdta de jugo de limón
- Una pizca de sal
Instrucciones
Para el Gazpacho:
- Lava el tomate y con la punta de un cuchillo, saca el pedúnculo del tomate (la parte verde) y si es necesario, la parte del centro del tomate que esté muy dura. Corta en trozos pequeños (no necesitan ser tan pequeños porque después los vas a licuar).
- Lava el pepino, remueve las puntas del pepino, corta el resto en trozos pequeños. (pela la cáscara si el tipo de pepino que usas tiene una cáscara muy dura).
- Pon todos los trozos (de tomate y pepino) en la licuadora o usa una licuadora de mano (minipimer). Agrega la mitad del agua, un poco de aceite de oliva y jugo de limón, agrega también un poco de sal, pimienta, comino, ajo y una pizca de azúcar. Licúa hasta que la sopa quede homogénea. Si usas una minipimer o licuadora de mano, la sopa no quedará tan sedosa, si prefieres la sopa más sedosa, usa la licuadora.
- Ahora prueba y revisa si necesitas agregar más aliños y si es que te gusta el espesor de la sopa. Normalmente, en este paso yo agrego más agua, porque me gusta la sopa más líquida. También agrego más aceite de oliva y si es necesario más jugo de limón. Luego le agrego un poco más de sal, pimienta molida, comino y el aliño más importante: ajo (yo ocupo ajo en polvo). Siempre le agrego al final una pizca de ají en polvo para darle un suave toque picante, pero este paso es opcional. Licúa la sopa una vez más y agrega más aliños sólo si es necesario, usa una espátula para terminar de mezclar la sopa.
Para la salsa de menta:
- Lava las hojas de menta.
- Usa una licuadora de mano o minipimer. Licúa las hojas de menta con las 3 cdas de yoghurt.
- Tienes que licuar hasta que las hojas de menta queden lo más pequeñas posible y hasta que la salsa tenga como una espuma (o burbujas). Agrega 1 cdta de jugo de limón y una pizca de sal. Licúa una vez hasta para que se haga más espuma.
Sirve la sopa de inmediato (para que la salsa de menta no pierda la espuma). Esta receta es para 3-4 porciones de sopa del porte de una entrada. Yo sirvo la sopa primero con un cucharón y luego uso una cuchara para verter con cuidado la salsa, que al ir moviendo la cuchara, sola va a ir creando un lindo diseño. Puedes acompañar la sopa con trozos de pan crujiente.